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Cuando
nos vamos a comprar una bota es muy importante elegir
correctamente nuestra talla. De forma general siempre se lleva un número
más del que usemos normalmente, es decir, si llevamos un 40 pues
escogeremos un 41. Pero hay personas que incluso llegan a llevar dos
números más.
Entre
los dedos y la puntera debe haber un espacio de unos 2-3 centímetros.
Esto es muy importante pues evitará que nos hagamos daño en las uñas,
evitando que estas se caigan. Para comprobar que nos sobre este espacio
lo primero que debemos hacer es ponernos la bota y, sentados, con los
cordones desatados, echar el pie hacia delante hasta que los dedos
toquen la puntera de la bota. Entonces la mano debe entrarnos
perfectamente por la parte trasera de la bota. Ese espacio por detrás es
el que tendremos por delante al atarnos la bota.
Para
finalizar debemos ponernos las botas, atarlas bien y caminar un poco
por la tienda viendo que sensaciones nos da la bota, si nos sentimos
cómodos, si la bota es ligera, etc. Si en la tienda existe alguna rampa,
podemos caminar por ella para ver sí los dedos rozan la puntera, si
esto pasase llevaríamos un número más.
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